Se supone que...

Se supone que no debería atreverme a esta aventura: un blog donde las palabras navegan en un guiso de ambigüedades. Un guiso en el que las ausencias soberbias y la arrogancia supina de una lexicografía tonta y cursi aflorarán en cada oración, en cada recodo de mi pobre y previsible expresión metafórica.
Pero siento la necesidad de otro canal donde mis sentidos se bifurquen, atornillen o maceren. Un canal donde las entrañas puedan mostrarse sin piedad, sin convencionalismos avaros de obsecuencias o calcomanías culturales que no me motivan y vanamente tratan de encorsetarme.

Bienvenidos a este vuelo rasante donde los planetas chocarán y la mutación de los sentidos estará en la mira de los Dioses y Diosas.

lunes, 23 de abril de 2018

Encuentros

Y un día salió el sol
y me encontraste amiga, me encontraste
vos soñabas
vos buscabas
 y yo en el mientras miraba el horizonte a ver qué pasaba
y pasó
te asomaste y nos dimos un abrazo a la distancia.

Y un día empezamos otra vez a hablar
a reírnos, a llorar
catarata de anécdotas, de silencios
seguimos la conversación allí, donde hace mas de 20 años había quedado
un día, como cualquier otro día, nos dijimos "Hola " y seguimos hablando
como si nada hubiese alterado nuestro tiempo
tiempo de luchar, apechugar, remar contra el destino incierto
tiempo detenido en nuestras vivencias y deseos de antaño
aunque haya pasado la mitad de la vida.

Y nos escuchamos, nos sinceramos
vos desde la bruma austera y el frío impiadoso de aquel mar tan amado
yo desde esta altura reseca y cobriza que somete mi piel y mis pensamientos
a un ahorro de silencios, implacable sol y tierra
Vos me contás y yo te cuento
vos te reís y río,
relatás tus sueños, tus desvelos
y maravillada yo te sigo.
Te sigo de ahora en mas hasta que ya no pueda.
Porque un día ya no podré ni seré
o seré un objeto mas, una ceniza mas que fertilice este cansado suelo.

Y de pronto otra vez vos frente a mí
y yo frente a vos
entrelazadas
unidas
soldadas
la misma confianza, las mismas palabras, las mismas risas, las mismas creencias
el respirar, amar y latir,
sufrir y volver a sufrir
transformar las broncas y penas en belleza y alegría
las tuyas en murga y las mías en tic tac
el nuestro de amor de amigas, donde quiera que estemos.

Dedicado a Graciela Moschini