Taylor, Editorial de los Cuatro Vientos (2022)

 Mi sexta novela, que salió del horno-imprenta en abril de 2022, es fruto de un largo proceso interior y exterior. Interior, por la catarsis que asumí y acepté; exterior, porque no ha sido sencillo llevar adelante este tipo de temáticas. Esta novela tiene una particularidad: es la primera novela erótico-relojera publicada en Argentina. 

No crean que les adelantaré demasiado de la trama... pero digamos que el personaje central, Angélica (que luego verán que de central no tienen nada de nada...) se cree posta que es una escritora re copada. Y de copada no tienen nada. Para colmo de males, la trama de su novela es aburrida ( un reloj que no se sabe muy bien qué recórcholis pinta en el argumento,  ni qué pito toca...) y ella, Angélica, empieza a hablarnos de su marido, un tal Taylor. Sonamos, muchaches: se armó quilombo. 

¿ Quieren que les diga más...? Pues no. Los dejo que se palmen de angustia. 

No es por mandarme la parte, pero creo que la novela es sensacional. Y de tan sensacional, será un rotundo fracaso editorial, para no perder la costumbre. Pero ya saben cuál es mi motto; y parafraseando a Churchill, exclamo: El éxito es ir de de fracaso en fracaso sin perder el entusiasmo. Amén...

Las fotos son de mi amiga Carla Zaffini ( ojo al piojo ); Mariela Aquilano la editora jefa suprema (genia colosal). De momento la novelita está a la venta en la editorial: http://www.deloscuatrovientos.com.ar/. Conforme vayan pasando los días y semanas, podré decirles en qué librerías estará disponible para que la puedan comprar. 

Toca dar las gracias a las potras caballosas de mis amigas de toda la vida, a quienes va dedicada la novelita: Carla Zaffini ( la capa di tutti capi); Norma Cerdá ( ojo, que los deja sin dientes); Carina Pozzi ( somos 9, reina mariposa).

Y mención especial a las cascarrachas bucetudas Demi de Miranda ( ¿ Querés una cirujía...? ¡Que marche con fritas y a caballo!); la doctora Ludmilla Bernardo ( te hago un papanicolau, te hago); Belén Ayala ( mamacita superstar ); y Rocío Palomo ( ¿ Encuadernaciones...? Con glamour, gabirula, con glamour... ). 

Muy agradecida a la vida. En verdad que sí.