Es el esquema del amor que me perturba
en la sutil luz de tu referencia
que salpica el caliz lleno de malicias
espesando la gruta simple de la ironía
maliciosa detonación de celebraciones
se jactan de interiores mansos con la prosa
que sigue un cono de sombras y simulaciones
cabalgando en tu cuerpo la indiferencia
Es el color de la vida y sus desdichas
que me hunden en los mundos posibles de la ira
la cavilación, la complacencia, la belleza
de sentirme virgen de tactos ajenos y mugrosos
discrepo con la ciénaga imperturbable de los días
gastados de estrellas y pasos lentos
poséeme y átame a tu manantial riguroso
siénteme latir, cabizbajo entierro.
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